Inmivi, Aguas de Mérida, Cormetur y otras instituciones gubernamentales iniciaron una serie de actividades enmarcadas en el plan de embellecimiento de Palmarito.
Foto: Archivo Cormetur |
Para tal fin se ha emprendido un proceso de articulación de políticas públicas entre varias instituciones gubernamentales, el Instituto Merideño de Vialidad, Inmivi, la empresa Aguas de Mérida, la Dirección de Infraestructura (Dirfran), Cormetur y otras; además, la alcaldía del municipio.
Gonzalo Tarazona, presidente de Cormetur, informa que se han realizado unas reuniones preliminares para avanzar en ese trabajo, en las cuales ha tenido una importante participación la comunidad del lugar.
En el plan se contempla la atención de la vialidad, cuyos trabajos ya se iniciaron, la señalización, red de cloacas con el apoyo de Petróleos de Venezuela y dotación de aguas blancas, lo cual ya empezó.
Así mismo, a través de Cormetur se adelantará el proyecto de ordenamiento del balneario del lugar, y la capacitación y sensibilización turística a través de un plan sobre lo cual, con el apoyo del Hotel Escuela de los Andes Venezolanos, ya se ha iniciado un proceso con quienes venden pescado en las áreas del balneario.
Trabajan además, en el calendario de manifestaciones religiosas de la localidad y la instalación de centros de atención al visitante. Todo esto para definir un producto, su comercialización y venta, sustentado en la legislación turística. “La intención del gobernador Marcos Díaz es que la gente del lugar sea la administradora del balneario, por eso es importante el establecimiento de las bases jurídicas para que eso sea posible”, dijo Gonzalo Tarazona.
Explica que el papel de Cormetur está enmarcado en la planificación y el asesoramiento, para darle a la comunidad los elementos necesarios que la ayuden a emprender su propio destino en función de la actividad turística. “Se realizarán trabajos a corto, mediano y largo plazo para lograr el objetivo durante este año. A corto plazo se concretará el calendario de manifestaciones religiosas, la fase de sensibilización, así como el proceso de comercialización y venta del destino. A mediano y largo plazo, se estima la recuperación del balneario y las otras obras de envergadura que requieren más tiempo para su ejecución”. (Celina Sulbarán/Prensa OCI/Cormetur).
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